La ciudad de Toluca que es donde radico, se ubica en la zona central de México, de clima templado, aproximadamente a 60 km de la Ciudad de México. A partir del fuerte sismo ocurrido en el año de 1985, nuestra ciudad comenzó a experimentar un notable crecimiento poblacional y urbano, con lo cual varios sitios culturales y de entretenimiento como museos, teatros, centros comerciales y parques de diversiones se han visto favorecidos en cuanto al mejoramiento y oferta de esparcimiento.

Quizá un distintivo de México y de varios países de América Latina ocurre en los fines de semana, cuando la gente elige acudir con su familia a los parques públicos y recrearse con los atractivos como son los juegos mecánicos, compra de dulces, globos, helados, aguas frescas, antojitos de la comida mexicana tradicional (tacos, tortas, tamales, tostadas, quesadillas), o bien contemplar los actos de entretenimiento público que brindan los artistas de la calle. Ahora bien, para los bolsillos mas pudientes existe la posibilidad de acudir a los museos tradicionales y de tecnología, o realizar un recorrido por el primer cuadro de la ciudad a bordo del tranvía turístico (caminar los primeros cuadros de la ciudad es también buena opción)

El emplazamiento comercial conocido como ‘Los Portales’, y el jardín botánico ‘El Cosmovitral’, ambos ubicados en el centro de la ciudad, son seguramente dos de los distintivos mas importantes; el primero debido a su arquitectura colonial, antiguedad e importancia comercial, en tanto el segundo por ser el sitio donde el artista local Leopoldo Flores plasmó una de sus mejores obras plásticas.

Aproximadamente a menos de dos horas en automóvil, es posible llegar al parque nacional ‘Nevado de Toluca’, un volcán extinto de 4,690 msnm, es pues un atractivo para locales y turistas extranjeros, en invierno se llega a cubrir de nive la cima y buena parte de las faldas, aumentando el número de personas que acuden a este sitio. Fuera de temporada de nevadas es posible acceder a pie hasta la cumbre y contemplar el par de lagunas formadas sobre los cráteres, estos sitios fueron durante la época precolombina lugares para la celebración de ritos y comprobado por la evidencia arqueológica rescatada del lecho.

Por Mariano Santos