Treinta años después, y seguimos igual.

El SIDA, o VIH (que no son lo mismo), o como queráis llamarle, hace años que dejó de ser “el cáncer de los homosexuales”. Resulta, por un lado, un tanto triste, así como también irónico, como una enfermedad ha hecho más que cualquier política social por la igualdad de géneros, por unificar la población ante la educación sexual. Lo que empezó como una rara afección presente en un sector muy reducido y determinado de la población, terminó afectando a todo el planeta. Por fin algo que no discriminaba entre géneros, entre edades, ni colores, ni… pero tristemente, ese “algo” es una enfermedad mortal.

Es verdad, a día de hoy, existen medicaciones. La ciencia está avanzando muy rápidamente en ese sentido; pero se trata de medicina paliativa. Hemos conseguido cronificar la enfermedad, aumentar la esperanza y la calidad de vida de quien la padece. Pero señores, no se trata de una “salvación”: la medicina tan solo palia los efectos y alarga la esperanza de vida, pero no “cura”, por lo que siguen existiendo síntomas (graves) y detrimento real tanto en esperanza como en calidad de vida. No se nos olvide.

Y muchos piensan “bueno, al ritmo que va la ciencia, si yo me contagiara, pues hasta que desarrollara la enfermedad y estuviera jodido… a esas alturas seguro que tienen el remedio”. Error.

En general, los virus – cualquier tipo –  son muy difíciles de “curar”. Y el del VIH en particular lo será (si es que nunca llega a conseguirse) mucho más, dada su naturaleza. Un virus no es como una bacteria. El virus del SIDA es simplemente un complejo proteico, un conjunto de moléculas que consigue meterse dentro de la célula, y la célula los replica, destruyéndose a si misma en el proceso. Lo peor del caso es que contiene los mimos elementos, en general, que la propia célula (si no, ¿de donde sacaría la célula material para “montar” mas virus?). Por lo tanto, es dificilísimo (si no prácticamente imposible) encontrar un modo, algo, que consiga destruir ese virus sin destruir parte de la célula, si no es la célula misma. Lo que si hemos conseguido es “parar”, relentecer a la célula, una vez tiene virus dentro, en ese proceso de replicación, de copia, de mas virus. Por eso la enfermedad no puede curarse, pero puede cronificarse.

Algunos países – y todos conocemos el drama humano en Africa en este sentido – siguen teniendo índices altísimos de propagación cada año. Otros mucho más reducidos. Pero, señores, en TODOS los países del mundo hay nuevos enfermos cada año. Y muchos más que son portadores y infectan a otros sin saberlo. No es un problema “africano”, simplemente es todavía más grave, más critico allí. El SIDA, si eres pobre, te da una muerte a medio plazo y una vida agónica, si puedes costearte los combos de medicinas (hay gente que llega a tomar 20 pastillas distintas cada día, según el estadio de la enfermedad y tipo de VIH), te mata a largo plazo y con unos últimos años también agónicos. No lo quisiera yo para mi.

¿Lo más triste del caso? No son necesarias complejas y carísimas vacunas para no infectarse, ni se requiere de complicados procedimientos médicos.

Solo hay un método, UNO y nada más, que sea eficaz: EL CONDON. ¡Y funciona!

La mayoría de países le hacen a uno las pruebas de las enfermedades de transmisión sexual gratis (tan grave es el problema), y los condones son más baratos que cualquier tratamiento posterior. ..  Y desde luego mejores que una muerte agónica.

Condon + test y tendríamos la enfermedad curada en pocos años. Se curó la Viruela mucho más fácilmente en menos tiempo!

Así que, señores, si REALMENTE son fieles a sus parejas, háganse las pruebas, pidan a sus parejas que se las hagan, si deciden optar por métodos anticonceptivos alternativos. Y si no quieren o son fieles, ¡ningún problema! Nadie pide imposibles, y al fin y al cabo, a follar que son 2 días. ¡Con hombres, con mujeres, con lo que a cada cual le apetezca y a cada cual le venga en gana! Quien soy yo para decir nada, no le juzgaré (si promete que usted hará lo mismo).

Pero, por favor, de verdad, no puedo insistir lo suficiente, POR-FAVOR, si no es por usted hágalo por los demás, pero, por favor, me da igual si usted hace el amor, o folla, o hace el triki triki, o el ñaca ñaca, o usted coje; si le gusta por arriba o por debajo, por delante o por detrás… eso no me importa, pero, haga lo que haga, hágalo Con-Con-Don!

Por Ferran Masip-Valls